Esta noche se estrena en Telecinco a las 22 horas "España pregunta, Belén responde", un nuevo espacio dedicado a la gran Belén Estaban en el que se someterá a la audiencia y a su pueblo, pues. Así, responderá como buenamente pueda a todas las preguntas que su querida audiencia tenga para ella. Y es que la Esteban es toda una experta en platós televisivos, en contestar a las preguntas de los periodistas y no periodistas. Pero ahora se enfrentará a las preguntas de la gente de la calle...
Sin duda, la Esteban ha atraído a un segmento de espectadores amplio y ha subido las audiencias hasta un punto inimaginable. Quizás por eso la quieran tanto en la tele y no por lo “que tenga que contar”, que no son más que palabras vacías. Pero hay muchos que se han tragado el anzuelo de este nuevo formato, que de tener éxito igual hasta se repite, y no duden en ver el programa esta noche para ver si su pregunta sale en la maravillosa señora Televisión. Una diosa que en estos tiempos parece que es la que parte el bacalao. Pero qué bicho le ha picado a los seguidores de esta famosilla de tercera que por tener solo tiene un nombre de lo más común y no oficio, aunque sí bastante beneficio. De la nada. Del esperpento y de soltar patochadas por ese piquito de oro que ha engendrado. La Esteban va a responder airosamente a las preguntas de su pueblo súbdito, y por favor, no crean que no está nada preparado y que todo es espontáneo, porque la televisión nunca es espontánea, sería todo un caos de esa forma.
Bonito nombre del programa Sálvame de Telecinco, es un programilla a mi juicio en el que trabajan algunos por su cara bonita, que cobran diariamente barbaridades por contar, sin rubor ninguno, la vida privada de otros, sin ton ni son. "Sálvame que me quedo en el paro, debería llamarse. Sálvame de trabajar como el resto de la humanidad. Sálvame con un sueldazo que me pague mis caprichos y vicios". Esa es la realidad.
¿Y el programa de “Belén responde” se quiere equiparar al exitoso programa de La 1 de Televisión Española “Tengo una pregunta para usted”?
Perdone pero queda mucho camino por andar y mucha escoria que quitar. Por ahora, la tele sólo está llena de patrañas que pretenden atraer a una audiencia que aspira a contenidos vacíos, de entretenimiento, que atrofian la materia gris. Pensemos por un momento qué es la televisión y veremos en lo que nos hemos convertido. Ella es reflejo de nuestros gustos, porque si existen programas como estos son porque los vemos. Y quién diga que no, se miente a sí mismo. Pero ya me contarán ustedes si es que ven este programa. Yo aunque me pica la curiosidad por ver qué espectáculo da nuevamente aquella bastarda que se hace llamar “princesa”, me quedaré durmiendo ajena a lo que se está cociendo en Telecinco.
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